«Mr. BLUE SKY» / The&Partnership y OMD UK se unen para la campaña del British Gas Team GB y ParalympicsGB
British Gas, el proveedor de energía más confiable del país, se ha asociado con el equipo GB y ParalympicsGB en una nueva campaña que pone patas arriba los estereotipos deportivos.
Para transmitir ese importante mensaje, ¿quién mejor que tres atletas de alto rendimiento y energía del Equipo GB y de los Juegos Paralímpicos GB: Tom Daley (OBE), Katarina Johnson-Thompson y Ellie Simmonds (OBE).
Realizada con las agencias asociadas The&Partnership y OMD UK, la obra maestra de la campaña es una película para televisión de 60 segundos, dirigida por Traktor. Comienza como una película publicitaria deportiva intensa y de alto rendimiento que esperarías de empresas como Adidas, mientras los atletas de élite parecen estabilizarse para el momento más importante de sus carreras deportivas.
El factor de bienestar de la campaña se ve amplificado por la icónica y alegre canción de la marca, «Mr. BLUE SKY» de ELECTRIC LIGHT ORCHESTRA, clasificada en varias encuestas como ‘la canción más feliz del mundo’, elevada a través de formatos multimedia que priorizan el audio activado.
ELOSPAIN:
British Gas, the nation’s most trusted energy supplier, has partnered with Team GB and ParalympicsGB in a new campaign that flips sporting stereotypes on its head.
To deliver that important message, who better than three high-performing and high-energy Team GB and ParalympicsGB athletes: Tom Daley (OBE), Katarina Johnson-Thompson and Ellie Simmonds (OBE).
Delivered with agency partners The&Partnership and OMD UK, the campaign’s showpiece is a 60-second TV film, directed by Traktor. It starts like an intense, high-performance sports advertising film you’d expect from the likes of Adidas, as the elite athletes seem to steady themselves for the biggest moment of their sporting careers.
The feel-good factor of the campaign is amplified by the brand’s iconic, upbeat music track ‘Mr. Blue Sky’ by Electric Light Orchestra, ranked in a number of polls as ‘the happiest song in the world,’ elevated through media formats that prioritise audio-on.
