ELOcuencias / Final show

Sabido es que no era precisamente JEFF LYNNE muy amante de los shows en directo con ELO, quizá más por aquello de su manía perfeccionista que por cualquier otra circunstancia. Él sabía que no podía reproducir la música que grababa en estudio en ningún concierto en vivo tal como la concebía y eso le frustraba a la vez que hacía que cada show en directo fuese un poco, un suplicio en el que sólo estaba atento a que cada nota y cada acorde sonase a tiempo y en su medida justa.

Un momento cumbre para él era cuando llegaba el momento de la despedida. Ese instante donde recibían el aplauso de todo un público entregado después de haber recibido «el concierto de sus vidas», y que JEFF, a su vez, recibía con un suspiro y un agradecimiento por haber acabado su trabajo, que, en ocasiones, y por motivos ajenos a su voluntad no había podido entregar como en otras ocasiones y, casi nunca, como a él le hubiese gustado.

Se marchaba, de alguna manera correspondido, pero, en muchas ocasiones, con la convicción de que se podía haber hecho mucho mejor, y eso, mermaba en su ánimo para enfrentarse al próximo show del cual esperaba sobre todo, ese momento final, después de haber intentado mejorar el trabajo anterior y respirar tranquilo, aunque siempre quedaba la duda de aquellos quienes hubiesen quedado insatisfechos por cualquier defecto de sonido o error subsanable. La perfección siempre persiguió a JEFF LYNNE como su propia sombra y eso le hizo ser único e irrepetible. Y siempre la misma pregunta: ¿Qué hacía un músico de estudio como él sobre un escenario?

Precisamente ahora, cuando la despedida, esa despedida definitiva, está a la vuelta de la esquina, es cuando quizá más le cueste levantar los brazos para decir adiós, a juzgar por el tiempo que llevamos sin noticias de ÉL. Precisamente ahora que, prácticamente ha conseguido esa cuasi perfección en vivo que siempre buscó. ¡Lástima que falten tantos y tan GRANDES compañeros en esa última banda…!

Sabemos que volverá a los escenarios y será por última vez que se despida de sus fans, ahora que ha logrado lo que a tanto miedo tenía… Ahora su música es casi perfecta y puede estar tranquilo por esa parte. Ahora los que tememos esa parte de cada show suyo es cuando finaliza y se despide, porque sabemos que es definitivamente el final de una triunfante carrera musical irrepetible que no volverá y, cuando llegue su último show y levante sus manos por última vez, se abrirá una nueva época para él, pero también para nosotros sus fans, que buscaremos los ecos de ELO/JEFF en cada rincón del resto de nuestras vidas sabiendo que no se repetirá más que ese eco y que sólo nos quedarán los recuerdos de la mejor de las épocas musicales de la historia en nuestra memoria y… dando gracias que la vivimos!!!

Será un 26 de octubre de 2024 cuando JEFF LYNNE levante sus brazos por última vez y diga ADIOS definitivamente a todos sus FANS, presentes y ausentes en ese momento. Bajará el telón y con él caerá todo el peso del éxito que pocos, muy pocos consiguen alcanzar y nosotros quedaremos mudos, y lo que es peor, sordos de nuevas melodías, si nada se anuncia como pregrabado para la posteridad de lo que, a partir de ese momento, fue ELECTRIC LIGHT ORCHESTRA o JEFF LYNNE’S ELO. Nuestra GRAN SUERTE es haber vivido esa época junto a quienes lo hicieron posible.

Nunca dejaremos de dar las GRACIAS POR SU MÚSICA a cada uno de estos GRANDES MÚSICOS que pusieron banda sonora a nuestras vidas y que nos acompañaron a cada paso durante más de 50 años. GRACIAS.

ELOSPAIN:

It is well known that JEFF LYNNE was not particularly fond of live shows with ELO, perhaps more due to his perfectionist tendencies than any other reason. He knew he couldn't reproduce the music he recorded in the studio exactly as he conceived it in any live concert, and this frustrated him, making each live show a bit of an ordeal, as he was solely focused on ensuring every note and chord sounded on time and just right.
A peak moment for him was the farewell. That instant when they received the applause from a devoted audience after delivering "the concert of their lives," and JEFF, in turn, would sigh with relief and gratitude for having finished his work. Sometimes, due to circumstances beyond his control, he couldn't deliver as he had on other occasions, and almost never as he would have liked.
He would leave, somewhat validated, but often with the conviction that it could have been much better, and this diminished his spirit for the next show, where he mainly anticipated that final moment. After trying to improve on the previous performance, he could breathe easy, though there was always the doubt about those who might have been dissatisfied by any sound defect or correctable error. Perfection always pursued JEFF LYNNE like his own shadow, making him unique and unrepeatable. And always the same question: What was a studio musician like him doing on stage?
Now, just as his final farewell is around the corner, it might be even harder for him to raise his arms to say goodbye, given how long it has been since we last heard from him. Now that he has practically achieved that near-perfection in live performance he always sought. It’s a shame so many great companions are no longer here...

We know he will return to the stage, and it will be the last time he says goodbye to his fans, now that he has overcome what he once feared so much. Now his music is almost perfect, and he can be at peace with that part. Now, those of us who fear the end of each of of his shows do so because we know it marks the definitive end of an unrepeatable triumphant musical career. When his last show comes, and he raises his hands for the final time, a new era will begin for him, but also for us, his fans, as we seek the echoes of ELO/JEFF in every corner of our lives, knowing it will not be repeated. We will only have the memories of the best musical era in history in our minds and... be grateful that we lived it!

On October 26, 2024, JEFF LYNNE will raise his arms for the last time and say goodbye definitively to all his fans, present and absent in that moment. The curtain will fall, and with it, the full weight of success that very few achieve will descend, and we will be left speechless, and worse, deaf to new melodies, unless something pre-recorded is announced for posterity from what was, from that moment on, ELECTRIC LIGHT ORCHESTRA or JEFF LYNNE'S ELO. Our great fortune is having lived through that era alongside those who made it possible.

We will never stop giving thanks for their music to each of these great musicians who provided the soundtrack to our lives and accompanied us every step of the way for more than 50 years. THANK YOU.